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El día sábado 13 de abril se concretó la entrega de ayuda solidaria de los cursos del Colegio SPM a las 28 familias de Quilpué que resultaron damnificadas por los incendios ocurridos en el mes de febrero pasado.

Las familias del colegio (alrededor de 60 personas) fueron representadas por estudiantes y apoderados, quienes primero fueron a visitar los terrenos y casas de sus familias “apadrinadas” y en el lugar entregaron sus aportes, para luego invitarlas a realizar el cierre en la capilla Nuestra Señora de Guadalupe, ubicada en el sector de Pompeya Norte, donde viven las familias damnificadas.

Al encuentro en la capilla participaron las familias de Quilpué, junto a las familias del colegio (PK a IV medio), reuniéndose en torno a esta actividad alrededor de 90 personas, entre adultos, jóvenes y niños.

En el contexto de Cuaresma y Semana Santa, la Pastoral del Colegio Seminario Menor se planteó el desafío de hacer carne su Misión: “Ser una comunidad capaz de responder a los desafíos actuales, para contribuir a la construcción de una sociedad más justa a luz del Evangelio de Cristo”.

Y surgió así la pregunta… ¿Cómo hacer carne nuestra misión en el contexto actual? Y la respuesta fue unánime, había que comprometerse con las familias que hoy nos necesitan. Y ¿Quiénes son esas familias?  Las familias que sufrieron los embates de los incendios de la V región en el mes de febrero.  Es ahí donde nos sentimos llamados a ser luz y consuelo para otros, era ahí dónde como colegio queríamos comprometernos.

Y así partió este sueño concreto que sentíamos que Jesús nos invitaba. Y para llevarlo a cabo nos contactamos con el Párroco de Villa Alemana para ver dónde había mayor necesidad de apoyo de parte del colegio. Inmediatamente nos dirigió a Quilpué, específicamente en el sector de Pompeya y Vertientes, ya que la ayuda en esos sectores estaba muchísimo más lenta.

Así nos pusimos en campaña, el padre nos entregó un listado de 28 familias que necesitaban de nosotros y nos fuimos contactándonos con cada una de ellas. Necesitábamos vincularnos, conocernos y detectar las necesidades que tenían particularmente cada una. Fue un proceso en que al conocer la realidad que estaban viviendo esas familias se nos hacía urgente dar a conocer esta realidad para así poder dar respuesta en algo a lo que ellos necesitan.

Las características de estas familias es que perdieron todo en los incendios, que a pesar de que los terrenos ya estaban bastantes limpios, muchos dormían en carpa o de allegados donde algún familiar. La mayor necesidad era tener techo para recibir el otoño que ya se acercaba, como también instalar lo básico para sus casas de emergencias que ya les estaban instalando.

Partimos entonces, convocando a los delegados de pastoral de los apoderados de colegio para invitarlos a este sueño, saber si ellos se sentían invitados a apadrinar a una familia para que dentro del próximo mes todo el colegio se comprometiera con Quilpué.

Los cursos se entusiasmaron rápidamente y ellos quisieron vincularse directamente con su familia apadrinada. Cada curso tomó contacto con dichas familias y en conjunto fueron buscando las mejores alternativas para ayudarlos. Fue impresionante lo que se fue produciendo en los cursos. Al conocer la realidad concreta de una familia, los acercó y motivó muchísimo más a colaborar con su familia apadrinada. Hay cursos que fueron a conocerlos directamente en terreno y establecieron un contacto más directo.

El sábado 13 se abril partimos desde el colegio en una caravana de casi todos los cursos hacia Quilpué. Cada curso se había contactado con sus familias para ir a verlos a sus terrenos e ir a dejarle las cosas a su lugar. Además, nos reunimos a las 12:00 PM en la capilla Nuestra Señora de Guadalupe (Quilpué) para entregar en forma simbólica lo recolectado por los 28 cursos del colegio a las familias.

“Esta iniciativa se vincula directamente con nuestra misión como colegio y como comunidad, y nos permite -junto a las familias- promover valores fundamentales en nuestros estudiantes, fomentando la participación significativa y el desarrollo de la responsabilidad social”, afirma Patricia Valenzuela Barrios, directora de Formación SPM, al tiempo que destaca el vínculo que han establecido los cursos (estudiantes y padres) con las familias afectadas por los incendios, vínculo que refuerza el sentido de esta iniciativa solidaria.

Compartimos a continuación registros realizados por los apoderados durante el viaje a Quilpué:

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